• Hace un año cantaba con el corazón
• Una de las mejores y con popularidad
Hace un año, en plena campaña por la gubernatura, Evelyn Salgado Pineda cantó con sentimiento una canción conmovedora que impactó a miles de guerrerenses que seguían su periplo en busca del voto.
Para muchos, era una oferta político-electoral inédita, diferente, fresca y pegadora en popularidad. No se equivocaron sus operadores electorales en guiar a Evelyn hacia un encuentro distinto y crucial con sus potenciales electores.
Un año después, Evelyn luce en los primeros lugares de popularidad nacional por su personalidad, trabajo y carisma política. Su presencia causa empatía, despierta interés, emoción y genera confianza en sus palabras, su discurso.
Este lunes, había motivos de Evelyn para estar muy alegre, efusiva y llena de optimismo. En puerta el festival por el Día de las Madres, la entrega de miles de toneladas de fertilizante a más de 334 mil productores de maíz, la aplicación de candados para evitar la opacidad y crear más transparencia en la aplicación de recursos y el uso de los mismos.
Evelyn estaba radiante, bromeaba con periodistas, se tomó fotos por docenas y definió varias líneas de trabajo con su equipo de trabajo en materia de desarrollo rural y agropecuario.
Jorge Peto, titular de la SAGADEGRO, aunque no emocionó a nadie con su discurso barroco, medio neoliberal, de la época setentera, no escatimó en frases de alegoría a la cuarta transformación y entrelazó su discursiva más hacia la política que a su rama agropecuaria.
Bajo el rayo del sol, los camarógrafos de medios, sudaron la gota gorda, mientras los fotógrafos de los funcionarios se atravesaban por todos lados y “ensuciaban” las tomas a “contraluz”, que arruinan el trabajo. En fin…
La gobernadora Evelyn no dejó su buen humor y hasta instruyó a su jefe de comunicación social, René Posselt Aguirre a preparar el próximo “Día del Padre” con los periodistas. “Para que vean cómo los quiero”… y apapachó a un fotógrafo que iluminó su rostro duro, de facciones muy idénticas al rostro de Mario Moreno, que incluso algunos colegas así le dicen “Mario Moreno”. Las carcajadas estallaron.
Carmelo González, Ulises Olivares “Mimoso”, entre otros, se acercaron a la foto. Uno de los guardias a voces quería quitar a los reporteros. “Ya se tomó la foto… Váyase para allá!”, ordenaba el espigado malencarado con camisa a cuadros en rojo. “No insista, no me moveré”, le respondí al caradura.
Víctor Manuel Villalobos Arámbula, titular de la SAGARPA federal, se quedó a la mitad de la calle rodeado por sus colaboradores. Los periodistas le preguntaron más del fertilizante. Le recordaron al impresentable ex “súperdelegado” federal y a su incondicional Jorge Gage Francoise, de triste recuerdo para los productores del campo guerrerense, porque los “rasuró” del padrón por sus pistolas.
Peccata minuta, de viejos recuerdos, como el de hace un año, luego de la “madre de todas las guerras sucias electorales” que se hayan registrado en Guerrero.
Hace un año, una voz sacudió a miles de guerrerenses que la escucharon cantar los éxitos de “Selena”, con emotividad, pasión y sentimiento. La acompañó un grande de la música guerrerense, José Manuel Zamacona (qepd)… y por supuesto, su padre Félix Salgado Macedonio.
Hoy, la misma voz conduce con una línea discursiva los destinos de los guerrerenses.
Es Evelyn Salgado Pineda, gobernadora de Guerrero. La primera mujer que gobierna la entidad del sur, donde nació el programa nacional de fertilizante gratis a todos los productores del campo, sin exclusiones ni favoritismos.
Claro que había motivos de Evelyn para estar feliz, alegre y radiante.
