Por Juan Sánchez Andraka
El Colegio del Estado era la máxima casa de estudios en el Estado de Guerrero. Estaba ubicado en Chilpancingo, frente a la alameda que llamaban del Chapitel, ahora Granados Maldonado. Los alumnos estaban organizados en una Federación de Estudiantes. En 1960 el director era el profesor Alfonso Ramírez Altamirano. El gobernador era el Gral. Raúl Caballero Aburto.
Entre los estudiantes del Colegio había inquietudes. Soñaban con la creación de la Universidad del Sur. El Director del Colegio tenía gran antipatía por la organización de los estudiantes.
El primero de abril el gobernador rindió su tercer informe de gobierno. Sorprendió al auditorio al decir: “Mediante el decreto No. 2 del 30 de marzo de de 1960 se crea la Universidad de Guerrero”. A este informe no fueron invitadas ni la Federación de Estudiantes, ni la asociación de padres de familia. El representante de Presidente de la República fue el Lic. Luis Echeverría Alvares, Oficial Mayor de la Secretaría de Educación Pública.
El Profesor Alfonso Ramírez Altamirano asumió el cargo de primer rector.
La federación de estudiantes decidió hacer un oficio al gobernador para pedirle Autonomía, Libertad de Cátedra, Aumento de Subsidio y que el rector y el personal docente tuvieran título universitario.
El gobierno del Estado y la rectoría crearon un grupo de choque con estudiantes becados y militarizados al que llamaron Pentatlón Universitario.
El 20 de octubre la federación de estudiantes redactó otro oficio al gobernador para insistir en la Autonomía, la salida de Alfonso Ramírez Altamirano y la titulación del personal docente. Se solicitó también que los espacios adjuntos al edificio formaran parte del patrimonio universitario. Estos espacios eran: El parque infantil, el casino, el estadio Andrés Figueroa, las canchas de básquet, las de frontón, el local de la imprenta y la pequeña plaza de jaripeo.
Pidieron que el subsidio fuera aumentado a un millón y medio de pesos. Se pretendía entregar este oficio en la mañana del día 21 de octubre.
El profesor Alfonso Ramírez Altamirano supo de lo que se pretendía y anunció la expulsión de los integrantes de la federación de estudiantes.
Inmediatamente, era medio día, el Presidente de la Federación, Jesús Araujo Hernández, declaró la huelga estudiantil con el lema: “Autonomía y Consolidación Universitaria”.
En la tarde llegaron los del Pentatlón. Se extendieron frente al edificio. Tenían en sus manos garrotes y cadenas. Frente a ellos se extendieron también muchos padres de familia.
Así empezó todo.
¿Qué sucedió después?
Continuará…
