El gobernador aseveró que el Estado no podrá ser sometido por ningún grupo de la delincuencia, como se ha pretendido en la Costa Grande, en los que se incendiaron vehículos particulares y del servicio público aunado de que se bloquearon carreteras para así presionar la salida de autoridades e impedir que la policía realice operativos.
Estas declaraciones las dio el mandatario desde Zihuatanejo; se trasladó ahí para sostener reuniones con transportistas que suspendieron el servicio público para exigir que se atienda el problema de seguridad en esa zona.
“…la fuerza y la presencia del Estado no puede quedar sometida a ningún grupo delincuencial, no lo vamos a permitir; y vale la pena que el gobernador del estado con su presencia deje muy claro cuál es nuestra ruta a seguir”, destacó el gobernador.
Tampoco desea Astudillo Flores que haya confrontaciones y volvió a insistir que el Estado no se someterá a caprichos, ni a actitudes de personas que están fuera de la ley.
Destacó que estará atento de los acontecimientos en los distintos municipios de la entidad, pues es el gobernador de Guerrero y dijo que las autoridades estatales se encuentran preparadas en caso de un nuevo bloqueo de miembros de la delincuencia.
El gobernador habló sobre la incertidumbre de reanudar clases en Zihuatanejo y dijo que su presencia en ese municipio era para apoyar e insistir que todo tiene que volver a la normalidad.